La impunidad multiplicada en el país

Escrito por el 26/01/2014

 

Hay más de 100 asesinatos impunes en su mayoría jóvenes, morochos y pobres”

 

La jornada contó con los testimonios de familiares de jóvenes asesinados en diferentes lugares del país. Cerca de las 5:30 de la tarde abrió la segunda charla del día sobre “Derechos Humanos de Hoy” Julieta Vinaya, madre de Atahualpa Martínez Vinaya, asesinado en junio de 2008, en Viedma, provincia de Río Negro.

  


 

Julieta comenzó agradeciendo a Vanesa Orieta, hermana de Luciano Arruga, y a todos los presentes y luego contó que “a Atahualpa lo asesinaron el 15 de junio cuando se encontraba en el pub Miloca con su amigo Juan Pablo Guachinchail comiendo una pizza. El amigo fue al baño y Atahualpa desapareció. Habiendo dos patovicas en el lugar, nadie los vio salir. Atahualpa mide 1,80 metros, tiene 100 kilos, o sea que es una persona grande y no puede pasar por desapercibida”.

 

Atahualpa apareció en un descampado a 5 kilómetros del pub con un disparo en la espalda calibre 22. Julieta aclara que “el lugar no fue vallado, ni se siguió el protocolo existente para casos de personas asesinadas”. En la causa hasta el momento hay tres personas procesadas Felipe Carrasco, Carlos Morales Toledo y Belén Barrientos: “las tres tienen que ver con el mundo de la noche”, agrega la madre y aclaró que su hijo no sabía cómo se manejaba ese mundo y que luego se intentó vincular el crimen por asuntos de polleras o de drogas, pero sus compañeros y profesores “salieron a decir quién era Atahualpa, que durante tres años llevó en el manubrio de su bicicleta a diario a su amigo que no podía caminar. Que era un joven que quería una sociedad más justa, más solidaria”.

 

Atahualpa tenía 19 años, estaba cursando el quinto año y ya tramitaba una beca para estudiar en la Escuela Latinoamericana de Medicina en la Habana, Cuba. “Mi hijo tenía derecho a vivir, a seguir su sueño que era ser médico. Él en diciembre se iba ir a Cuba y no lo dejaron. Lo asesinaron antes”, agregó la madre.

 

La causa judicial por el asesinato lleva más de 5000 fojas, desde hace poco llevan el caso la Gremial de Abogados, como equipo. Al respecto Amaya dijo: “Yo no quiero una verdad a medias, yo quiero toda la verdad. Y si en esto, el poder policial está metido, los quiero atrás de las rejas. Y si están metidos fiscales y jueces también los quiero detrás de las rejas. Porque no me quiero quedar con una verdad a medias sin saber por qué lo asesinaron y dónde. Y lo más terrible que me enteré hace poco es que Atahualpa estuvo agonizando casi una hora, a él lo pudieron haber salvado, no lo quisieron salvar, a él lo dejaron morir”.

 

Haciendo hincapié en la importancia de la lucha y en las dificultades que enfrentaron, recordó que tanto ella como Roberto, el padre de Atahualpa, estuvieron en huelga de hambre durante 19 días. Pero afirmó que “en estos cinco años tuvimos que aprender. En este aprendizaje salimos a hacer las marchas una vez por mes, cada quince días o una vez por semana. Empapelar Viedma. Sacar 15.000 afiches y distribuirlos entre La Quiaca y Ushuaia. Pedimos ayuda a los jóvenes, a las iglesias evangélicas llevando afiches y contando lo que pasó con Atahualpa. También fuimos a las peregrinaciones de las vírgenes, a las iglesias católicas y tratamos de que hicieran eco. Con esto lo que aprendimos es que no es solamente Atahualpa el asesinado en Río Negro, aprendimos que hasta fines del año 2008 hay más de 100 asesinatos impunes en su mayoría jóvenes, morochos y pobres”.

 

Y agregó “a medida que va pasando el tiempo, una se va desgastando, se va muriendo de tristeza y de dolor porque se va quedando absolutamente sola. Entonces aprendimos que no nos podemos quedar solos, tenemos que ir a las marchas, acompañar a los distintos familiares, porque una necesita sentir que no está sola”. Y señaló la importancia de la participación de todas las personas que estaban presentes, porque “sin ustedes una no puede seguir saliendo y pedir justicia”.

 

*** *** *** ***

 

IMG 6912

 

Que no haya ni un chico más matado por la policía, ni un Arruga, ni un Hernández, ni un Brian…”

 

El segundo testimonio de la mesa fue el de Liliana Silva, madre de Matías Casas asesinado, un joven de 19 años asesinado en Neuquén el 29 de julio de 2012 por un policía.

 

“Supuestamente a Matías lo paró un policía, no sabía quién era, le preguntó si era Matías y empezó a disparar. Mi hijo con la moto en arranque y agarrado de su novia arranca. Lo siguen en una camioneta con un policía de seguridad, le siguen disparado y cuando mi hijo se cae un taxista avisa a la policía, la policía lo rodea y permite que Méndez (Héctor Daniel) baje de la camioneta y lo patee. No contentos con eso se ponen a charlar, tarda en llegar la ambulancia y además en vez de llevarlo al hospital que estaba a 8 cuadras, lo llevan al regional que está a 30.”

 

El 17 de diciembre pasado empezaba el juicio y el abogado del agente Héctor Daniel Méndez presentó un certificado aduciendo que el policía tenía tuberculosis, sin embargo cuando el médico forense y otro médico enviado por la familia del joven asesinado fueron a constatar la enfermedad, el procesado no estaba en su domicilio. Se suspendió el juicio y renunció el abogado del policía, que fue reemplazado por el defensor oficial Pedro Telleriarte. Frente a tantas complicidades la madre de Matías dice “espero que el juicio empiece y se lo condene a perpetua. Es lo mínimo que pido. Aunque mi hijo no vuelva más espero que no haya ni un chico más matado por la policía, ni un Arruga, ni un Hernández, ni un Brian, ni un Matías Casas, ni un Solano, ningún joven más matado por nuestra policía”.

 

*** *** ***

 

IMG 6735

 

A Sergio lo hizo desaparecer la policía (…) Responsabilizamos a los que gobiernan nuestra provincia por no poder darnos respuesta de dónde está Sergio”

 

Mercedes Avalos, hermana de Sergio Avalos, desaparecido en Neuquén hace más de diez años, expresó: “Esta es una lucha que llevo hace más de diez años, una lucha por mi hermano desaparecido en Neuquén, oriundo de Picún, con apenas 17 años. Para ir a buscar su futuro, empezó en la Universidad del Comahue a estudiar para contador público, de familia humilde y de pueblo chico. Consiguió una beca para vivir en la residencia universitaria. El 13 de junio se junta con compañeros a festejar un cumple. En la madrugada va a bailar a un boliche “Las Palmas”, y desde ahí nunca más supimos de él. Fin de semana largo, ese domingo era el día del padre. Mi hermano nunca llegó. El sábado con mi familia lo empezamos buscar y no apareció. Lunes feriado no teníamos respuesta. Se hace la denuncia un miércoles. Se empieza a averiguar dónde había ido, con quién. Y, oh casualidad, en el boliche donde había ido, se borra y no se graba los minutos antes que él ingrese; es un boliche custodiado por policías ex -militares. Y gente bastante pesada. Sergio había ingresado y no había salido en un lugar donde va un montón de gente ¿nadie lo ve salir? Desaparece.”

 

“Nosotros decimos que a Sergio lo hizo desaparecer la policía. Como lo vinieron haciendo hace muchos años atrás y lo siguen haciendo”, gatillo fácill sin importar el dolor de la familia, cortarle la libertad a la vida, de seguir siendo una persona y de tener un futuro. Con el apoyo de los estudiantes de universidad hicimos muchas marchas pidiendo que la universidad se responsabilize por la desaparición de un estudiante. Las autoridades de la universidad toma con pinzas el hecho de que desaparece un estudiante. Aún hoy responsabilizamos a los que gobiernan nuestra provincia, por no poder darnos respuesta de donde está Sergio, responzabilizamos en Sobisch y lo seguimos haciendo, porque no quiso sacar un recompensa para que el que supiera algo lo diga. Tambien responsabilizamos a Jorge Sapag, hoy actual gobernador de la provincia. Sergio no se fue por su propia voluntad y hoy está como desaparecido. Diez años se están tomando para encontrar una persona, el año pasado con un nuevo abogado se logró hacer el pedido de cambio de caratula a desaparición forzada”, explicó la hermana de Sergio Avalos en la charla “DDHH de hoy”.

 

“Tenemos que unirnos en cada una de las luchas y desmantelar este aparato represivo, nos dicen que son los mejores, pero nosotros decimos que no, que son los que nos están desapareciendo a nuestros chicos, a nosotros no nos van a callar, hasta no tener a Sergio, hasta no tener juicio por todos los casos”- dijo Mercedes Avalos antes de finalizar su intervención.

  

*** *** ***

  

IMG 6745

 

 

Esto sigue pasando hoy, con este Gobierno, no es en la época de la dictadura”

Francisco Núñez, papa del joven Diego Núñez, asesinado por un efectivo de la Policía Federal , relató: “El 19 de abril de 2012 era el cumpleaños de Diego. Salió a festejar con un grupo de amigos, anduvieron por Caballito y entraron en un edificio de Hortiguera 20, a metros de la Avenida Rivadavia. No está claro qué era el lugar, un puterío se decía. Cuando estaban subiendo a un departamento de ese edificio, de ahí salía un policía de la Federal , de INTERPOL más precisamente, con un maletín, que yo supongo por haber andado en la calle, que sería un recaudador de plata o proveedor de droga de los tugurios”.

 

 “El policía se persiguió, sacó un arma y se despachó a los tiros con los 3 pibes. Uno estaba en la parte más baja de al escalera, otro ya llegando al descanso y Diego en un primer descanso. Literalmente lo agarra a los tiros”, explicó.

 

“Los jueces son malintencionados y forros, porque Diego muere en cuclillas. El único disparo recto que tiene es en la ingle, quedó en cuclillas en el primer descanso de la escalera, después tiene otro cuatros disparos de arriba hacia abajo. Oh, casualidad, los jueces lo enterraron NN, lo llevaron a la morgue como NN”, aseguró Núñez.

 

Luego prosiguió: “Nosotros empezamos a las 8 de la mañana a buscarlo a Diego, porque era su cumpleaños y tenía que estar en casa. El siempre a pesar de salir con sus amigos estaba antes de las 5 en casa, era muy raro que se quedar aun rato más. El tenía unas zapatillas muy particulares, y cuando empezamos a preguntar a la Comisaría N ° 24, nos dijeron que ellos iban a averiguar todo, que no hacía falta que llamemos a nadie más, ellos se encargarían de buscarlo. Ahí le dije a mi mujer que era muy raro que la Comisaría te dijera que iba a buscar a un pibe”.

 

“Entonces, con un mal presentimiento fuimos a buscarlo nosotros. Después llamamos de nuevo y una policía me describió enseguida cómo estaba vestido, le pregunté si lo había visto, me dijo que no, y le dije cómo podía describir su vestimenta si no lo había visto. Entonces le digo a mi familia: ‘Diego esta preso o en algún hospital’. Ahí empezamos a buscarlo más fervientemente. No lo encontramos por ningún lado, pero estábamos seguros que algo le había pasado, por lo que nos dijo esta policía”.

 

“Al 20 o 21 de abril agarro y fuimos directo a la morgue, lo encaré al sargento de la puerta y le dije ´necesito que me hagas una diligencia acá adentro, mi pibe no fue a casa y quiero saber porque se comenta que mataron a un pibe en Caballito´. Me dice que había habido un enfrentamiento, y le describí cómo estaba vestido Diego. Me dice hay un pibe con esa descripción pero que fue un enfrentamiento con la policía. Le dije que iba a ir en cana, porque a mi hijo lo mataron, el no tenía armas para enfrentarse con la policía. Después no nos dejaron ver el cuerpo, teníamos que tener una orden de un Juez, buscamos al Juez, y ahí pudimos comprobar que siempre pasa lo mismo: cuando matan a un pibe lo entierran NN, para no hacerse cargo del asesinato que cometieron”, remarcó Núñez.

 

Diego fue sometido en cuclillas y ejecutado. Esto era muy común de las policías y militares para dar a entender que lo ejecutaron. Esto sigue pasando hoy, con este Gobierno, no es en la época de la dictadura, pasa en este Gobierno que se hacen los corderitos. Ustedes que son jóvenes tienen que entender que van a heredar el mundo, los gobiernos mienten cuando dicen que van a dejar un mundo ideal, ustedes tienen que seguir buscando ese mundo ideal. Yo no tengo ganas de perdonarle a este Gobierno lo que esta haciendo con los jóvenes”, aseguró.

 

“A Lucía, la mama de Diego, dos veces intentaron secuestrarla, después le armaron una causa a Francisco, mi otro hijo, nunca lo citaron, lo dieron como prófugo. Él ahora está preso en Marcos Paz, después de pasar por Devoto y Ezeiza. Fue incitado al suicidio. La estamos pasando mal como familia, pero a pesar de tener un hijo muerto, desde la parte gubernamental, institucional, bien gracias… Lo único que nos contiene son las organizaciones, son ustedes. Por suerte o por mala suerte somos cada vez más. Les agradezco profundamente el poder expresarnos acá. Necesitamos mucha mas fuerza, hay un montón de pibes a los que les ha pasado lo mismo. Por favor, no naturalicen esto que pasa”, concluyó Núñez

 


Opiniones

Deja un comentario


Emisión radio RNMA

La comunicación no es mercancia

Canción actual

Título

Artista

Radios RNMA

Background