Culmina el juicio por el femicidio de Cecilia Basaldúa pero el pedido por verdad y justicia, continúa

Este próximo viernes 1 de julio, en los Tribunales de Cruz del Eje, el juicio por el femicidio de la joven viajera, artista, artesana y militante, desaparecida y asesinada en Capilla del Monte en 2020, llega a su punto final. Se dará lectura a los alegatos, se conocerá la deliberación del Jurado Popular y la sentencia. El proceso que se inició el 2 de mayo, cuya instrucción y elevación a juicio estuvo a cargo de la cuestionada fiscal Paula Kelm, llevó al banquillo de los acusados a una sola persona: Lucas Bustos, detenido a los pocos días de hallarse el cuerpo sin vida de Cecilia. A lo largo de estos meses, los testigos tanto civiles como funcionarios, miembros de la fuerzas y peritos, dejaron en evidencia las contradicciones en sus relatos de cómo fueron los hechos. Y un nombre no aparece en los testimonios, el del único acusado, al cual se le otorgó el cese de la prisión preventiva el pasado 10 de junio por faltas de pruebas. Este viernes, más allá de la sentencia, si se lo condena o no a Bustos la pregunta por ¿quién mató a Cecilia? seguirá enunciándose por parte de la familia y aquellos y aquellas que buscan justicia y verdad. En el Enredando las Mañanas conversamos con Liliana del Movimiento Plurinacional Feminista y Disidente de Capilla del Monte para repasar los momentos más importantes e irregularidades de este juicio. Por RNMA.

Cecilia había llegado a Capilla del Monte en marzo del 2020 para instalarse allí a escribir un libro de sus viajes realizados en América Latina a lo largo de 5 años. En medio de la cuarenta estricta fue expulsada del Camping Municipal y de otros lugares, quedando a la deriva en la plaza de la ciudad, de donde una mujer Viviana “Rasta” la llevó a la casa de uno de los principales sospechosos para la familia, Mario Mainardi.

El 5 de abril la joven perdió contacto con su familia. El protocolo de búsqueda inmediata se activó recién el 13 de abril. El 25 de ese mes, el cuerpo de la viajera fue encontrado sin vida y con signos de abuso sexual. Para el 28 la fiscal Paula Kelm ya tenía a un culpable: Lucas Bustos. El 22 de agosto se viralizó un audio de una supuesta testigo que involucraba en la desaparición y asesinato de Cecilia a Mario Mainardi, “Vivi La Rasta”, polícias y a la misma fiscal Paula Kelm como encubridora. El audio nunca fue peritado. Tampoco fue tenida en cuenta la denuncia de Lucas Bustos en donde afirmó que debió declararse culpable del femicidio por estar bajo torturas policiales. Ante esto la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación se constituyó en querellante.

En marzo del 2021, Paula Kelm elevó el juicio sin terminar la investigación. Este comenzó el pasado 2 de mayo en los Tribunales de Cruz del Eje. Para repasar las preguntas que deja abiertas este proceso y los momentos más importantes, dialogamos con Liliana del Movimiento Plurinacional Feminista y Disidente de Capilla del Monte, colectivo que desde el momento de la desaparición de Cecilia en medio de una cuarentena estricta por Covid 19, organizó la búsqueda de Cecilia Basaldúa y acompaño a su familia.

 

Nueva pericia al lugar del hecho: contradicciones entre los testigos, las pruebas y los peritos

El 13 de mayo a pedido de la querella de la familia se realizó una nueva inspección ocular en el lugar donde se encontró el cuerpo sin vida de Cecilia. Se solicitó por las contradicciones que expresaban los relatos de los testigos, las pruebas y los resultados de los peritos. Sobre esto Liliana contó: “La pericia se realizó para saber cómo fue el lugar del hecho, cuánto tiempo se tarda en llegar. Eso se tuvo que reconstruir porque todos los testimonios daban horarios imprecisos. Según quien, se podía haber tardado 40 min, 30, una hora cuarenta, es decir, había tanta impresión en lograr decir en cuanto tiempo de determinado lugar se había llegado al cuerpo de Cecilia que hubo que hacer una reconstrucción”.

 

Pruebas a metros del lugar del hallazgo: una denuncia que se desestimó

El 19 de mayo, el juicio debió interrumpirse ante el pedido de la abogada de la querella, Daniela Pavón que pidió incorporar una denuncia que había sido realizada el 15 de mayo del 2020 pero que la Fiscalía de Instrucción de Cosquín desestimó. Se reanudó el 10 de junio y pasó a un cuarto intermedio.

Liliana expresó: “Estamos en la última instancia que se fue atrasando porque previo al cuarto intermedio, se presentó una prueba que era una denuncia sobre un robo que había ocurrido en una casa abandonada a 600 metros de donde encontraron el cuerpo de Cecilia. Esa prueba hizo que se detenga un poco el juicio. Y pesar de que no estamos en una etapa de instrucción, esto es de presentación de pruebas, se consideró que era importante porque en esta casa se encontró sangre humana, pelo y nunca fue relacionada con la desaparición y femicidio de Cecilia. A pesar de ser un lugar cercano al lugar del hecho.

Fue una denuncia del 15 de mayo de 2020 y cuando ocurre esa escena de robo y demás en esa casa ya había un culpable que era Lucas Bustos. O sea que la fiscalía, no sé si por una cuestión de desidia o intencionalidad no investigó esto porque ya consideraba que Bustos era el culpable del femicidio.”

Además dijo: «Tampoco se puede entender si el 25 de abril se encuentra el cuerpo, el 19 de mayo se hace una denuncia sobre una casa donde se encuentra restos de sangre y pelo cerca del lugar. Como no relacionan un caso sobre el otro, siendo que las denuncias se hicieron en la misma comisaría de Capilla del Monte y la instrucción que la hacía Paula Kelm.”

Cese de la prisión preventiva al único acusado: ¿por qué fue importante?

Al retomarse el juicio luego de la inspección ocular, el 10 de junio, a pedido de la abogada de Lucas Bustos, la doctora Brandt, se otorgó el cese de la prisión preventiva a su acusado. La abogada argumentó que durante todo el proceso no había pruebas suficientes para culpabilizar y mantener en detenido a Lucas. El joven permanecía en un penal desde el 28 de abril del 2020. Sigue siendo el único acusado y será condenado o absuelto según la sentencia de este viernes.

Para la fiscal de instrucción Paula Kelm, Bustos era culpable por la cercanía al lugar del hallazgo del cuerpo y por una denuncia en la cual él mismo se incriminaba. Dicha declaración denunció luego que la había realizado bajo amenazas y tortura policial. Otra denuncia más desestimada por la fiscal y que llevó a que la Secretaría de Derechos Humanos se constituyera en querellante por los derechos de Lucas.

Le pedimos a Liliana que nos cuente por qué el cese de la prisión había sido tomada como una buena noticia, no sólo para la familia del único acusado sino también por parte la familia de Cecilia y quienes acompañan el pedido de verdad y justicia. Explicó: “La libertad de Lucas lo que intenta demostrar es que no se puede condenar a alguien con tan pocas pruebas o en realidad, con ninguna prueba. Si hacemos un repaso, en el ADN de Cecilia y el ADN de Bustos y los indicios donde supuestamente se encontró el cuerpo no hay entrecruzamiento. De esto hablaba la Secretaría de Derechos Humanos, que para que un hecho se considere tal tiene que haber ADN en el cuerpo de Cecilia de Bustos y viceversa y además una relación con el lugar donde sucede el hecho. Ninguna de estas cuestiones que son simples de responder con tanto tiempo para investigar, fue comprobada. No hay trasferencia de ADN en ninguno de los cuerpos y tampoco hay una secuencia que los relacione con el lugar.”

Amplió: “Lo que hace el otorgamiento del cese de la prisión preventiva es afirmar todo lo que decíamos, la falta de pruebas y de investigación de líneas que se debían haber seguido, por más que sean negativas pero al menos la intención de considerarlas. Cuando mencionamos a Mainardi o Vivi la Rasta, nadie está diciendo que fueron los femicidas, pero tampoco se está limpiando el camino para aclarar las intervenciones de estas dos personas.

La familia y la fiscalía en teoría buscan un cometido que es buscar a responsables pero esto no sucedió en ningún momento del juicio, por eso la felicidad de que no lo sigan condenando.”

Y agregó: “Lucas Bustos perdió dos años de su vida adentro de una penitenciaría, no es poco. Y es grave porque además por los sectores vulnerables nadie protesta, nadie habla de la cantidad de presos que hay en el país en estas condiciones. Se los mete presos y después no se les da ninguna explicación, si fuiste culpable o no, no les interesa. En el caso de Bustos, es notorio de que no había motivos para que continuara detenido. No es la felicidad de no haber encontrado al femicida de Ceci sino es por la libertad de una persona que evidentemente no cometió el crimen y está pagando con su libertad.

Hablábamos con las compañeras que todo este juicio es una construcción muy mal llevada con carencias como tales, como presentó la querella de la familia de Ceci, en cuanto a la falta de investigación y creemos que justamente desde el 2 de mayo hasta la fecha, en estos dos meses no ha habido pruebas contundentes que aseveren que Lucas es el femicida. Y no es casual que le levantaron la prisión preventiva y está en su domicilio.”

La instrucción de Paula Kelm: una investigación plagada de irregularidades y omisiones

No es la primera vez que la fiscal es cuestionada por su ejercicio en la fiscalía. Acumula ya casos en su haber, como la causa de Jorge Reyna, que apareció muerto en 2013 en la comisaría de Capilla del Monte. A su mamá le dijeron que su hijo se había ahorcado. Paula Kelm no investigó a los policías, la comisaría fue remodelada, las pruebas perdidas y en 2019, la fiscal archivo la causa. Susana, la mamá de Cecilia y Olga, la madre de Jorge Reyna, se abrazaron en la puerta de los Tribunales de Cruz del Eje. La impunidad es la misma, la solidaridad también.

“Lo que realiza una instrucción es recolectar todas las pruebas, las analiza y va descartando o sumando más para lograr el objetivo que es encontrar a el o los culpables del femicidio de Cecilia. En esta construcción que se va haciendo, evidentemente Paula Kelm es muy tendenciosa porque a las 48 hs de encontrar el cuerpo, ya tenía a un culpable que era Lucas, sin haber realizado si quiera una reconstrucción del hecho, esto se torna un poco sospechoso»

Sobre la posibilidad de realizar un pedido de juicio político a la fiscal expresó: “ esto se piensa, pero hay muchos más que actúan en todo esto, por ejemplo la policía, los peritos forenses, psicológicos que hace una pericia de Cecilia ya muerta o el perfil de un Lucas Bustos ya detenido. Todo esto hace que una crea cada vez menos en la posibilidad de que este juicio dirigido por Paula Kelm y este jurado tenga alguna certeza.”

Acerca de las expectativas de este viernes, en el final del juicio, en base a como se desarrolló todo el proceso, Liliana afirmó: “día a día desde el 2 de mayo fueron tan poco convincentes en las pruebas que se trataban de demostrar que supongo que si el jurado popular tiene un criterio y ha seguido todo el proceso saben que es la prueba más acabada de la falta de instrucción o por lo menos directamente la ineficacia de la fiscalía de Kelm.

Todo esto, a los que hemos asistido al juicio nos da pauta de que esto es insostenible y que esperamos que no quede preso un inocente como puede ser Lucas Bustos y que el jurado popular pueda reconstruir y entender esta investigación tan mal hecha.»

Un juicio que culmina

Liliana informó sobre lo que ocurrirá este viernes donde se conocerán los alegatos, la deliberación del jurado y la sentencia: “Queda un resto de testimonios. La querella de la familia de Ceci presentó una petición el último día, el 10 de junio para que una de las peritos que tuvo intervención en el análisis de las muestras que tomó, encontradas en esa casa abandonada, sangre y pelo pueda hacer una exposición de lo que halló o de lo que no se encontró. Tiene que ver esto con la deficiencia de las muestras, de cómo se preservaron y la intención de la perito era pedir una posible intervención para realizar nuevos análisis. Esto se va a negar porque ya se anunció que lo único que se va a permitir es la exposición de la doctora Florentina Bustos, perito de parte. Luego se pasa a los alegatos de fiscalía, defensa, querella y Secretaría de Derechos Humanos y luego a un cuarto intermedio donde el jurado popular decidirá la suerte de Lucas Bustos.

La expectativa era que se pudiera hacer un análisis de esta casa abandonada con tanto rastro de que algo sucedió ahí adentro pero ya existe una vocación de finalizar el juicio en esta semana. No sabemos si va a ser favorable a Bustos debido a la falta de pruebas, lo decide el jurado popular.”

Le consultamos sobre la posibilidad de un nuevo juicio en el caso de que Lucas resultara absuelto y Liliana explicó: “En realidad se debería abrir una nueva investigación para convocar a nuevo juicio y es muy difícil volver a citar a todos los que hemos visto en este juicio que estuvieron involucrados en toda la investigación porque ya en este mismo hubo contradicciones. ¿Cómo se cita a estos de nuevo? Es una pregunta que aún no podemos responder.

Aquí hay intereses creados, una fiscalía como la de Paula Kelm que insiste en que Lucas es el único culpable y acá se termina su intervención. También podría darse que pase a otra fiscalía porque volver a la misma estaría viciada. Se abren muchas cosas y estarán las pericias de los funcionarios y de quienes han participado ahora en ver cómo se resuelve. Será un camino muy arduo y muy doloroso para la familia pasar por todo esto en el intento de buscar a los verdaderos femicidas.

El pedido de verdad y justicia por Cecilia que continúa

Como lo vienen haciendo desde el 2 de mayo organizaciones, activistas, colectivos, convocaran en las puertas de los Tribunales de Cruz del Eje, este viernes a partir de las 10hs.

Allí el tribunal compuesto por Santiago Camogli Roque, Raúl Alejandro Castro y Carlos Escudero y el jurado popular decidirán la suerte de Lucas Bustos.

“Vamos a acompañar desde la 9 de la mañana que comienza el juicio y las compañeras de Córdoba estarán en los Tribunales de la Capital porque necesitamos que se visibilice en otros lugares. La idea es el 1ro de julio esperar, acompañar, estar cerca no sólo de la familia sino también de las organizaciones que hemos estado bancando esto. Es una vigilia durante todo el día y es importante porque se pueden abrir dos caminos: la culpabilidad de Lucas o no. Si lo liberan o no, nos seguimos preguntando quién mató a Cecilia, quienes la mataron? Todo esto es un interrogante que la familia no está dispuesta abandonar y que se investigue hasta las últimas consecuencias.»

La lucha no termina acá, tanto si se lo condena a Bustos o no se lo condena. Solo llega a un punto de este juicio.

Va a ser importante escuchar los alegatos. Hay una intención de los Tribunales de Cruz del Eje de transmitir a partir de un link pero no podemos confirmar porque tampoco descartamos que haya un “problema técnico”. Nosotras vamos a estar y como hicimos con todos los días del juicio, haremos una crónica con lo que vaya sucediendo pero si existe link lo vamos a compartir inmediatamente.”

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