Avanza el covid en la cárcel de Senillosa

La cárcel de Senillosa en este momento encierra a 475 personas, repartidas en tres módulos. Se confirmó que un preso y al menos 19 penitenciarios están infectados de covid-19. Si bien desde que se declaró la pandemia hasta hoy la población carcelaria de esa unidad fue reducida en casi el 20%, esta medida no alcanza para evitar que el virus continúe propagándose al interior de los muros de esa prisión federal.

En diálogo con El Zumbido, el defensor federal y cotitular de la comisión de cárceles Pablo Matkovic informó que el único preso al que hasta el momento se le confirmó covid-19 está en el módulo 2, donde además están aislados otros 22 detenidos. También detalló que “hay19 penitenciarios con casos confirmados y otros tantos que llegan alrededor de 70 en observación y aislamiento”, que han estado en contacto con detenidos.

Matkovic relató que desde las defensas se han presentado varios habeas corpus, gracias a los cuales se consiguieron algunos avances, entre los que destacó “la entrega de elementos de limpieza con refuerzos”,  “los precios de cantina” y “el sistema de videollamadas”, aunque se rechazó, por ejemplo, el pedido de celulares para los presos. Destacó la importancia de anticiparse para “ver si el servicio penitenciario cumple con todas las pautas de protección a los detenidos”.

En relación a las actividades educativas, recreativas y laborales, el abogado dijo que “el caso de Senillosa es un caso distinto al resto de las jurisdicciones federales” y detalló que “hemos tenido habeas corpus de trabajo, de educación, y se le están garantizando la cuestión educativa”. También destacó que “se ha implementado el protocolo de visitas por videollamadas con los familiares y se ha hecho incluso un control exhaustivo sobre la alimentación y también se hizo un reclamo sobre los precios de cantina que también logramos implementarlos”.

Matkovic celebró que sobre esa prisión estén “trabajando activamente” la fiscalía, la defensoría, la comisión de cárceles y el juez “en la defensa de los derechos” y aseguró que “más allá de los inconvenientes que pueda tener estructurales esa cárcel, hay mucha actividad judicial en la protección de los derechos de los detenidos”, y ejemplificó que “la cárcel tenía 550 detenidos y llegó a tener 450; hubo un egreso por arrestos domiciliarios, libertades condicionales y vencimiento de penas de unas 100 personas que es una porción considerable de la población”, aunque remarcó que ante esta nueva realidad de contagios intramuros “no hay ninguna medida tomada por los jueces de darle arresto domiciliario a nadie”, pero “se suspendieron los traslados y egresos de Senillosa”.

Con casos activos dentro de la unidad y con casos de represores que han entrado y salido permanentemente con el virus, no es aceptable pensar en mantener encerradas a casi quinientas personas, porque, como venimos sosteniendo desde Comunicadorxs Anticarcelarixs, una vez que el covid entra en prisión, la masacre que produzca no será responsabilidad de “la pandemia”, sino del estado que no hizo, en este caso, lo suficiente para salvar a quienes a su represiva merced cumplen condenas.

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