César Casas y el cambio de condena para el asesino de Matías

Los jueces del Tribunal de Impugnación de Neuquén revocaron la sentencia del jurado popular que había hallado culpable al ex policía Héctor Méndez por el crimen doblemente agravado de Matías Casas, ocurrido en 2012, en Cuenca XV. Ahora se deberá realizar otro juicio en el que se fijará la nueva pena. Méndez había sido condenado a prisión perpetua en mayo pasado. Esta es la primera vez que los jueces quitan un agravante a un condenado tras un juicio con participación popular. Con la nueva calificación, de homicidio agravado por el uso de arma de fuego, se descarta la prisión perpetua y se deberá evaluar una pena de entre 8 y 25 años. Durante la emisión del miércoles 17 de diciembre de Enredando las mañanas nos comunicamos con Nadia Paris, integrante de Familiares y Amigxs de Víctimas de la Represión Estatal, quien a su vez nos trajo la voz de César Casas, padre de Matías.

Audio descargar

Durante la mañana del miércoles 17 de diciembre, Familiares, Amigos y abogados del Ceprodh que entienden en la causa de Matías Casas realizaron una conferencia de prensa en la Ciudad de Neuquén. Una vez finalizada, nos comunicamos desde Enredando las mañanas con Nadia París, de Familiares y Amigxs de Víctimas de la Represión Estatal, que se encontraba junto a César Casas, papá de Matías.

“Esta es una sentencia que se había dado en uno de los primeros juicios con la nueva modalidad de tribunal popular en Neuquén. Pero lamentablemente estos son los artilugios que busca la justicia o que deja para que las decisiones populares que son justas y se logran con la lucha, e imputan a algún agente del Estado se puedan tirar atrás y por eso en una instancia de apelación que hizo la defensa cambiaron la carátula”, explicó Nadia Paris en diálogo con Enredando las mañanas.

Paris afirmó que más allá de que consideran que la única pena que le toca a un agente de la policía que mata a un pibe en un barrio es la perpetua, el interés particular de los familiares y amigos se encuentra en la calificación del delito: “aunque le den todos los años que se le puedan dar, lo importante es la calificación donde se da cuenta que el policía lo hace en abuso de su condición de policía, y es la que enmarca el tipo de homicidios policiales o gatillo fácil que nosotros planteamos ante el tribunal popular los tres días del juicio y que es una problemática que se da en todo el país; las cifras son cada vez más altas, cada 28 horas hay un pibe que es asesinado por la policía y por lo tanto no se puede juzgar a cada policía como si fuera un loquito suelto que anda tirando con su arma, sino que hay que empezar a condenarlos como corresponde y en eso los casos tanto de Braian Hernández como el de Matías Casas han sido un puntapié para que a nivel nacional empecemos a ocuparnos para que estos precedentes queden para los casos que vienen”.

Durante la conferencia de prensa, los familiares y amigos de Matías tuvieron el acompañamiento de muchísimas organizaciones que además firmaron una petición ante el Tribunal Superior de Justicia, en la que se exige que se respete la condena que logró la familia con la lucha. Una lucha que no fue fácil que llegara a juicio: “este es el segundo que se le hace a un policía, el primero había sido el de Braian Hernández, y fue postergado en diciembre del año pasado, ya que tendría que haberse hecho el 16 de diciembre de 2013 con el antiguo código, pero nos encontramos con la sorpresa de que el abogado de la defensa presenta un certificado por tuberculosis y no se lo puede encontrar por ningún lugar y termina renunciando, los jueces le dan entonces la posibilidad de más días hábiles al nuevo defensor para que se ponga al tanto de la causa, y así pasamos para este año y empezó a funcionar el código procesal nuevo y por eso se llega a un juicio por jurados. Esta discusión la tuvimos justamente porque este nuevo código penal nos obliga a unificar la calificación con los fiscales, no podíamos nosotros acusar de una manera y los fiscales de otra, entonces los familiares de todas las víctimas de la región que estuvimos acompañando a la familia Casas tuvimos una muestra clara de cuál es la postura de la justicia con respecto a esto. Estuvimos más de tres horas de discusión con el fiscal (Pablo) Vignaroli, y el único argumento es que ellos no querían apuntar contra la institución, no estaban de acuerdo con nuestra perspectiva de la lucha, ellos no creían, no creen, que sean casos donde haya que tener una responsabilidad institucional, y nosotros tenemos re-claro que el policía dispara porque lo entrega el Estado y el Estado le otorga el arma para que dispare, así que no hay márgenes de error en esto. No lo vamos a tolerar y por eso queremos que vaya todo el peso de la ley con esta gente. No queremos que dentro de 40 años como pasa hoy día con los genocidas de ayer se tome la dimensión de lo grave que son estos crímenes y que se está cometiendo un exterminio silencioso”, aseveró Paris a ELM.

Relato de la impunidad

ELM también dialogó con César Casas, el papá de Matías, que se encontraba junto a Nadia Paris tras la conferencia de prensa realizada en la Ciudad de Neuquén.

En este marco, César repasó lo sucedido con su hijo en la noche del 22 de julio de 2012 en el Barrio Cuenca XV: “Matías estaba con su novia, tuvo una diferencia de palabras con el hijo (de Méndez) que no llegó a nada, pero el chico fue a la casa a exagerar lo que había pasado y el padre salió con el arma a buscarlo a Matías, a cazarlo prácticamente. Lo encontró, le preguntó si era Matías y le disparó, Matías se subió a la moto para irse, lo siguió de atrás disparándole, de hecho a un metro veinte de distancia le pegó el disparo en la espalda que fue el causal de la muerte, y otro tiro en el pie. Como Matías pudo escapar del lugar avanzó seis, ocho cuadras y cayó, y cuando cae llega la policía y lo rodea primero apuntándolo con una escopeta, parecía que Méndez los había llamado a la comisaría diciéndoles que andaba buscándolo, y cuando lo encuentran ahí llega Méndez y entre medio de los policías se mete y lo patea a Matías que estaba en el piso, delante de los policías, se saluda de manos con los efectivos y se va. Después la policía lo va a buscar a la casa y él entrega el arma en la comisaría. Fueron como si fueran una escolta especial, porque fue el comisario a buscarlo con todas las atenciones, y a partir de ahí lo nuestro fue salir a la calle. Lo de la calle sobre todo surgió por Matías, porque sus amigos empezaron a ver qué hacíamos, y salimos, nunca creí haber tenido la fuerza para poder salir pero Matías hizo que tuviéramos la fuerza para poder salir y reclamáramos porque la primera versión que existió fue de la parte oficial, de la policía, y decía que Matías andaba armado, que había amenazado, tratando de poner al policía como que estaba en peligro y resguardando su vida y la de su familia, entonces tenemos la suerte de que mucha gente se dio cuenta de cómo eran las cosas y salió la calle a acompañarnos y a luchar con nosotros”.

Para César lo ocurrido con su hijo quedó demostrado en el juicio que se llevó adelante en Neuquén: “las 12 personas que integraron el juzgado popular lo encontraron (a Méndez) culpable por unanimidad en menos de dos horas (de debate) con las pruebas, con las evidencias que teníamos de cómo habían pasado las cosas, y nos encontramos ahora con que los jueces manosean la determinación del jurado popular que lo encontró culpable”.

En relación a la decisión del Tribunal de Impugnación, César reconoció que se encuentran muy mal y molestos: “no nos esperábamos esto en esta instancia. Sí sabíamos que nos lo iban a hacer pero pensábamos en el Tribunal Superior de Justicia porque ahí es donde hicieron lo del policía (Claudio) Salas que mató a Braian, al que también le bajaron la condena, teníamos otras expectativas pero nos demostraron y nos tiraron abajo enseguida con que ellos tienen las decisiones acá, tienen que pagar favores políticos. Hace semana le dispararon al jefe de la policía de Neuquén, le tirotearon la casa y nadie busca a nadie, pero saben quién fue, fue la misma policía, son internas de la policía; esa semana también mandaron al policía (Darío) Poblete, el que mató al docente Carlos Fuentealba, otra vez a Zapala, donde lo dejaban salir a pasear, o sea les están dando premios, a los otros policías les bajan las condenas. Nos estamos dando cuenta que están dando lugar a que la policía acá haga lo que quiera y tiene el aval de la justicia. Esto está claro porque el veredicto popular lo pasaron por encima, entonces la verdad que tenemos mucha bronca respecto a lo que ha pasado, pero la bronca lo único que genera es más fuerza y querer luchar más y llegar más allá para que este tipo pague por lo que hizo, no estamos pidiendo la pena de muerte, estamos pidiendo que se haga justicia y que el tipo pague por lo que hizo, porque es evidente que un tipo de 25 años de carrera si sale a hacer una cosa así es porque está acostumbrado. En un barrio donde la presión de la policía es sobre la gente, sobre un sector que está en el oeste de Neuquén, es un sector desprotegido entonces la policía manipula todas las situaciones”.

De todos modos, los familiares, amigos y abogados de Matías Casas continuarán luchando para revertir la decisión del Tribunal de Impugnación y conseguir que el policía Héctor Méndez cumpla con la condena a prisión perpetua que le corresponde por haber asesinado abusando de su función policial.