Brian Hernández

En la madrugada del 19 de diciembre pasado, Brian salió con sus amigos en el auto del padre de uno de ellos. Durante el trayecto se cruzaron con un grupo de policías que les pidió detenerse. Los adolescentes se asustaron y continuaron su marcha. En ese momento, el efectivo Claudio Salas pretendió obligarlos a frenar disparando contra el vehículo, pero la bala le pegó a Brian en la nuca. El adolescente de 14 años fue trasladado en estado crítico al Hospital Castro Rendón, donde falleció al día siguiente.
Salas declaró luego que disparó porque creyó haber visto la culata de una pistola dentro del auto de los jóvenes y un fogonazo (pese a que no escuchó ningún estampido y a que los vidrios del auto estaban levantados). Como durante la requisa policial apareció un arma, la familia denunció inmediatamente que ésta había sido plantada.
La justicia neuquina realizó una inspección ocular en el lugar del asesinato. Principalmente se buscó determinar el nivel de iluminación en la zona para poder analizar si el policía tenía posibilidad de ver una pistola en ese auto.
Tras el procedimiento, Elizabeth, la mamá de Brian, aseguró que quedó probado que no se podía ver de ninguna manera el arma que supuestamente luego halló la policía en el vehículo, y que fue la excusa dada por Salas al momento de justificar su disparo.
Las pericias comprobaron también que el arma “encontrada” en el auto no era apta para el disparo.
Mientras la familia consideraba pedir reclusión perpetua para Salas, y exigir que se condene también a sus compañeros de fuerza por haber intentado encubrir lo sucedido, el juez de instrucción Marcelo Muñoz determinó la falta de mérito para el policía, ordenó su libertad y desestimó que el arma hubiera sido “plantada” por la policía.
La medida judicial tomada el 11 de enero,  generó gran indignación y bronca en familiares y amigos quienes realizaron un escrache en la casa de Salas, ubicada en el Círculo Policial. La llegada de la policía dispersó un poco al grupo de unas quince personas quienes más tarde se dirigieron a la comisaría 16 del barrio. La policía arremetió con balas de goma y Elizabeth Hernández -mamá de Brian- y su Hijo Alejandro sufrieron múltiples heridas en las piernas y en la cabeza.
Cuando el fiscal Maximiliano Breide Obeid apeló la resolución del juez Marcelo Muñoz que dejó en libertad al policía por falta de mérito dijo desconocer dónde reside el imputado. Lo hizo, concretamente, al solicitar la prisión preventiva y que la Cámara de Apelaciones habilite la feria para resolver el recurso planteado.
Hoy,  sábado 26 de enero, la multisectorial “Justicia por Brian” acordó realizar una muestra de fotos de Brian Hernández y otras “víctimas de la represión policial”. También una radio abierta y una recolección de firmas para pedir la condena a prisión perpetua para Salas, la renuncia del ministro de Seguridad Gabriel Gastaminza y juicio político al juez Muñoz. Será a partir de las 19 en el monumento a San Martín. Además, está previsto pedir una audiencia con el fiscal general José Gerez.