¡Feliz Cumpleaños, Mauricio!

El primer añito de gestión PRO trajo consigo problemas en muchos sectores, principalmente en educación.
Ciudad de Buenos Aires
En estos doce meses al frente del Ejecutivo porteño, Mauricio Macri se encargó de echar personal, subir el sueldo de sus funcionarios, bajar la cantidad de becas secundarias, aumentar el presupuesto en educación privada en detrimento de la pública, desabastecer de insumos y medicamentos a los nosocomios, amenazar con cerrar hospitales psiquiátricos y descentralizar la atención de la salud mental de la Ciudad. Tomó decisiones apresuradas, sin consultar, encaprichándose en que las medidas debían llevarse adelante igual, para luego dar marcha atrás (a veces) ante las críticas recibidas de diversos sectores políticos y sociales.
En los cumpleaños, lo lógico es que el que reciba los regalos sea justamente el cumpleañero; pero no, en este caso el que hace los regalos es el propio Mauricio…
Los docentes y alumnos del único colegio para chicos que viven en la calle, el Isaura Arancibia, denunciaron que el Ministerio de Educación porteño tiene pretensiones de cerrarlo. En esta escuela estudian 120 chicos de entre 12 y 20 años, la mayoría duerme en las estaciones de Constitución, Once y Retiro.
Desde hace diez años, la escuela les ofrece hacer la primaria en doble jornada y asistir a diferentes talleres de oficio. Pero con la llegada del macrismo a las decisiones de la Ciudad, las cosas comenzaron a cambiar. En dos oportunidades desde la cartera educativa se intentó correr de su puesto a Susana Reyes, coordinadora del Isaura. También adelantaron que el próximo año no habrá más talleres de oficios y ya llamaron a concurso para cubrir los cargos de los docentes que armaron la escuela. Como si esto fuera poco, aparece ahora la negativa oficial a homologar los diplomas de egresados de los chicos que se reciben este año. 
En tanto, los trabajadores del propio ministerio de Educación de la Ciudad informaron en conferencia de prensa que directores y coordinadores de distintas áreas y programas de la cartera han adelantado que habrá bajas de contratos, recortes en las remuneraciones y renovaciones parciales y limitadas solamente a febrero de 2009.
Los trabajadores también han denunciado una significativa disminución (de unos $440 millones) del presupuesto del área para contrataciones “hecho que permite prever una cadena de despidos y de ‘ajuste’ en las condiciones de contratación de aquellos a quienes se renueven sus contratos”. En este contexto, se realiza en todas las dependencias del gobierno de la Ciudad “evaluaciones de desempeño”, a partir de las que se pretende justificar nuevos recortes de personal.
Por su parte, los alumnos de la Escuela de Bellas Artes “Manuel Belgrano” vienen festejando desde hace tiempo. Desde el 11 de noviembre se encuentran tomando el edificio, ubicado en Barracas. Todo comenzó cuando las escuelas normales de la Ciudad pasaron al nivel terciario y la Belgrano quedó en el nivel medio de educación. Alumnos y docentes trabajaron en un plan que permitiera este traspaso. Al presentarlo, el gobierno porteño se comprometió a crear el Instituto Superior Metropolitano de Artes (ISMA). Pero a días de abrir las inscripciones a este nuevo profesorado, se dieron cuenta de que la forma en que se incluye a la Belgrano en el ISMA le hace perder su identidad y nombre, quedando su personal docente en disponibilidad, desconociéndose su pertenencia, la trayectoria y autoridad de la Escuela.
Es así como a través de la toma, muestras artísticas, intervenciones callejeras y marchas, los alumnos exigen el traspaso del Magisterio de Dibujo al Profesorado de Artes Visuales para nivel inicial, primario y medio no especializado; la inscripción 2009 dentro del edificio de la Escuela de Bellas Artes Manuel Belgrano; la autonomía, elección del rector y del consejo académico por la comunidad educativa; y el traspaso de la planta funcional de titulares docentes y no docentes, garantizando la estabilidad laboral y titularidad de los cargos. Durante esta semana, los alumnos se movilizan diariamente desde las 14 para escarchar la inscripción del ISMA en la Dirección del Área Artística (Esmeralda 55).
Pero la gran fiesta de cumpleaños, Mauricio la va a tener mañana cuando las distintas agrupaciones, organizaciones y organismos, que conforman el Espacio Multisectorial, marchen a partir de las 14, desde Av. De Mayo y 9 de Julio hasta la puerta de la Jefatura de Gobierno. Allí, a modo de regalo, le acercarán algunos de los tantísimos reclamos que el gobierno porteño se ha ganado con tanto esmero: Mejor calidad y más comida en las escuelas; Becas de estudio para todos los que las necesiten; Construcción de escuelas en la ciudad; Ampliación de vacantes; Participación ciudadana en la elaboración de la primera Ley de Educación; Cumplimiento de todas las leyes que garantizan el Derecho Social a la Educación; Por la salud pública, universal, gratuita y digna; No al cierre del Borda, Moyano, Infanto Juvenil y Talleres Protegidos; Construcción del Hospital de Lugano; No a la tercerización de servicios de salud; Política sanitaria para el tratamiento de las adicciones, Abastecimiento pleno de insumos y equipamiento hospitalario;  Política Integral de Vivienda en la Ciudad; Integración urbana sin desalojos; Ejecución presupuestaria para vivienda pública y social; Políticas públicas inclusivas para la niñez; Asignación universal por hijo, entre otras.
¡Feliz cumpleaños, Mauricio! (y cuidado con los deseos que pida al soplar la velita)