La situación de los seis campesinos paraguayos presos (Entrevista a Mirta Lezcano)
Escrito por Red Nacional De Medios Alternativos el 15/04/2015
El viernes próximo se realizará un acto en la Ciudad de Buenos Aires, convocado por distintas organizaciones sociales, políticas y de derechos humanos, por el Día Internacional del Preso Político. Será una jornada de lucha en solidaridad con los presos políticos vascos, paraguayos y argentinos. En la emisión del martes 14 de abril, dialogamos con Mirta Lezcano, hermana de Gustavo Lezcano, uno de los seis campesinos paraguayos extraditados desde la Argentina y que continúan presos en su país.
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“Actualmente los seis compañeros que estuvieron presos en Argentina se encuentran en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, en Asunción de Paraguay. Ellos fueron condenados a 35 años de prisión, pero las condenas aún no quedaron firmes. Sin embargo, los compañeros de la Gremial de Abogados de la Argentina ya se encuentran realizando conjuntamente con los abogados de Paraguay el procedimiento para presentar ante la Corte Suprema de Justicia el caso de los compañeros”, relató Mirta Lezcano al iniciar el diálogo con Enredando las mañanas, el programa de la Red Nacional de Medios Alternativos.
En 2005, Agustín Acosta, Roque Rodríguez, Simón Bordón, Arístides Vera, Basiliano Cardozo y Gustavo Lezcano fueron acusados de ser los autores del secuestro y posterior asesinato de Cecilia Cubas, hija del ex presidente de la Nación Raúl Cubas Grau.
Ante la persecución que sufrían en su propio país, los campesinos resolvieron viajar a la Argentina para pedir asilo político. Para ello cruzaron la frontera y se acercaron a Puerto Iguazú, donde les dieron un refugio por tres días. Luego les informaron que debían presentarse rápidamente ante el CEPARE (Comité de Elegibilidad para los Refugiados), donde debían pedir el refugio permanente. Lo hicieron el 2 de mayo de 2006 pero allí los esperaban efectivos de la Policía Federal e Interpol. De allí los llevaron a la cárcel de Devoto y luego a Marcos Paz.
En diciembre de 2008 fueron extraditados por pedido de los gobiernos paraguayo y argentino a través de una resolución del juez Ariel Lijo, y encerrados en la cárcel de Tacumbú en Asunción.
Al ser consultada por el estado de ánimo de su hermano y sus compañeros, Mirta Lezcano aseveró: “están con el mismo espíritu que los caracteriza, mantienen la moral alta como revolucionarios que son, como socialistas que son, como presos políticos se encuentran realizando algunas reuniones con los compañeros que los visitan frecuentemente, diferentes organizaciones. Se encuentran con el buen espíritu que siempre los caracteriza. Desde un comienzo, los compañeros sufrieron una persecución muy grande en la época del gobierno de Nicolás Duarte Frutos, el entonces presidente de Paraguay, por lo que tomaron la decisión de ir a la Argentina porque desde aquí se creyó que allá podrían tener ciertas garantías. El embajador de aquel entonces había mencionado que todos sus derechos podrían ser garantizados, pero después ya sabemos toda la historia de lo que sucedió. Estuvieron allá y luego fueron extraditados. En la época del gobierno de Lugo tampoco se pudo lograr ningún interés en profundizar en el caso de ellos, y ahora estamos con este gobierno que no solamente persigue a los de la izquierda sino a todas las dirigencias de base. La situación está cada vez más negra en Paraguay, de hecho no vamos a esperar mucho que acá se revea el caso de ellos, por eso estamos recurriendo a instancias internacionales”.
Cuando el juez Ariel Lijo otorgó la extradición, fijó además una serie de medidas que el gobierno debía seguir, como una suerte de control acerca de lo que podría ocurrirles a los campesinos, sin embargo esto no se vio plasmado: “eso quedó en los papeles –explicó Lezcano–, de hecho no hubo ningún tipo de seguimiento, y mucho menos de control, creo que son maniobras propias de la derecha para confundir a la ciudadanía y también para mantener una postura supuestamente de respeto a los derechos humanos, pero eso son para mí teorías”.
A pesar de la falta de respuestas en la justicia paraguaya, los familiares de los seis campesinos continúan luchando: “seguimos haciendo actividades con las organizaciones sociales, los compañeros de algunos partidos políticos que nos apoyan y actualmente sigue funcionando la coordinadora de familiares. El viernes vamos a tener una actividad frente al Panteón de los Héroes, estaremos ahí con nuestras pancartas, dando repudio a nuestro gobierno y también revitalizando el caso de tantos presos políticos que tenemos en Paraguay. Mucha gente y muchos compañeros en la región no están manejando que esa es la realidad de Paraguay. Muchos dirigentes campesinos con la excusa de la guerrilla están siendo constantemente judicializados, la persecución es una cuestión muy fuerte que estamos viviendo en nuestro país”, señaló Lezcano a ELM.
La actividad del viernes 17 de abril frente al Panteón de los Héroes, tendrá su correlato también en la Ciudad de Buenos Aires. A las 16, se hará una concentración en Avenida de Mayo y 9 de Julio, mientras que a las 17 habrá un acto en la esquina de las Avenidas Corrientes y Callao. Convocan Correpi, Coordinadora Antirrepresiva del Oeste y Coordinadora Antirrepresiva Sur, entre muchas otras organizaciones.