Por los pibes. Basta de Impunidad – Convertir el dolor en lucha – Eduardo Trasante, papá de Jere
Escrito por Red Nacional De Medios Alternativos el 26/01/2013
Eduardo es el papá de Jeremías, uno de los tres militantes del Movimiento 26 de Junio, integrante del Frente Popular Darío Santillán de Rosario, que fue asesinado junto a sus amigos Claudio y Adrián, el 1º de enero de 2012.
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“Si algo nos dolió mientras estábamos velando a nuestros hijos era saber que el gobernador de la provincia, Antonio Bonfatti, había dicho que era un ajuste entre bandas, mientras la intendenta decía que era un ajuste entre las barrasbravas de Newell´s y de Central. Nuestros hijos no eran soldaditos de nadie, ni tampoco barrasbravas, a nuestros hijos los mató un narcotraficante, que es Sergio Rodríguez, alias El Quemado, un hombre con mucha influencia en el gobierno de la provincia y en lo que hace a la seguridad, a la policía, a la insegura seguridad de la provincia de Santa Fe”, comenzó Eduardo su participación en la mesa Convertir el dolor en lucha.
Durante su testimonio, Eduardo detalló cómo asesinaron a su hijo Jere de 16 años, y a sus amigos Claudio de 19 y Adrián de 21: “Eran las tres de la mañana del 1º de enero de 2012, tres jóvenes del Barrio Moreno balean al hijo del Quemado, en un sí ajuste de bandas por el tema de los kiosquitos de drogas. Los pibes lo dan por muerto a Maxi Rodríguez, pero el chico no murió y llama al padre para decirle que lo estaban trasladando al Hospital de Emergencia de Rosario. El padre va a verlo y paga para que no asienten el nombre del hijo porque era buscado por la policía. Le pregunta quién lo había baleado, se pone en contacto con algunos integrantes de su banda, sale con su chaleco antibalas, y se dirigen al barrio Moreno. Alguien del barrio le indica dónde estaban los pibes, que era una canchita de fútbol, lugar de encuentro de los pibes del barrio. Alguien le avisa a estos pibes que el quemado con su gente iba al encuentro de ellos y se van. A las cuatro de la mañana, habían quedado en encontrarse en la canchita los chicos de la Agrupación M-26, que responde al Frente Popular Darío Santillán, dado que Jere, Mono y Patón eran militantes de esta organización en la ciudad, pibes que caminaban distintos barrios con miras de sacar a los pibes de la calle, del alcoholismo, de la droga, de la desocupación. A las cuatro y dos minutos irrumpe en la cancha, El Quemado y su banda, él portaba una ametralladora, y el resto otras armas, y acribillan a nuestros pibes”.
Eduardo contó que su hijo murió en el acto, y que la autopsia indicó que las balas de la ametralladora generaron una explosión múltiple de todos sus órganos. En tanto, Claudio y Adrián murieron en el traslado al hospital.
“En ese momento empezó una experiencia muy particular para nosotros, poder respaldarnos de alguna manera en la gente maravillosa del Frente Darío Santillán, que nos permitieron perseguir e ir alcanzando la justicia que esperamos que se haga por la muerte de nuestros hijos”, relató Eduardo.
Hoy, los cinco implicados están detenidos, y según los familiares de los jóvenes asesinados sobran elementos para dictar sentencia, por lo que se encuentran a la “espera propia de los tiempos de la causa”: “Pero creemos que en esto que perseguimos vamos a alcanzar la justicia que estamos buscando”, afirmó Eduardo y continuó: “El caso del triple crimen fue muy conocido en la ciudad, por donde se camine en Rosario está la foto de los chicos. Hemos caminado por distintos puntos de Argentina, pero no solamente por el triple crimen de Moreno, sino pensando en todos los pibes que están perdiendo la vida a causa del alto nivel de connivencia que hay entre el narcotráfico y la policía. Abrazamos una expresión del juez de la causa, que nos dijo que el triple crimen es un árbol dentro de un gran bosque del que no podíamos perder la visión, porque ese bosque son todos los negociados, lo oscuro de la ciudad de Rosario, todo lo que está ocurriendo allí. Desde el jefe de la policía de Santa Fe hacia abajo hay mucha gente comprometida, muchos comisarios y empleados de la policía que incluso tuvieron que ver con liberar la zona para el escape de los cinco implicados en el triple crimen”.
Eduardo es pastor evangélico y además capellán del sistema carcelario hace 17 años. “Decidimos tomar fuerza en Dios y caminar y batallar – reflexionó –, esto nos sensibilizó de una manera particular, porque hasta que no te pasa la cosa vos ves la muerte del otro como algo más, estamos tan acostumbrados a que maten pibes de los barrios, de las villas, a pibes pobres. Yo también soy capellán del sistema carcelario hace 17 años. Es un tema por el cual estamos caminando, hay un 30% de los detenidos que sale con una mente diferente, son un 30% menos de asesinos y ladrones en la ciudad, que determinaron cambiar su mente y su corazón a partir de los que les ha pasado”.
Eduardo trajo el apoyo y acompañamiento para Mónica, la mamá de Luciano, de parte de los familiares de Jeremías, Claudio y Adrián y del M26 y el FPDS de Rosario. “Les digo a todos que esto lo cambiamos entre todos o no lo cambia nadie, creo en el poder de la justicia de Dios, y aunque en Rosario tengamos una justicia corrupta a Dios no se le escapa nada ni nadie, y así como los cinco implicados en la muerte de mi hijo todos estaban fuera de Rosario, Dios a todos de la oreja los trajo y los presentó para que hoy estén privados de la libertad y estoy convencido que los que hicieron tienen que pagar, porque eso también es justicia de Dios respaldando y cuidando a los que más lo necesitan”, cerró Eduardo su intervención.