Por los pibes. Basta de Impunidad Convertir el dolor en lucha -Mónica, mamá de Luciano Arruga
Escrito por Red Nacional De Medios Alternativos el 26/01/2013
“Mi hijo me enseñó con su desaparición a no ser egoísta, a mirar alrededor, al costado, a no encerrarme”, dijo Mónica. Compartimos a continuación pasajes de su intervención durante la Jornada Cultural en Defensa de los Derechos de los Pibes.
http://archive.org/download/JornadaCulturalPorLosDdhhDeLosPibes.4AosSinLucianoArruga-/001-MesaDolorenLucha%2F02-Monica-MesaDolorenLucha-26-02-2013.mp3
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Creo que ya lo dijo todo Angélica, y nos quedamos tiesos… nos deja, sin palabras la mamá de Kiki. Me toca a mi contar, cómo era Luciano…como todos ustedes, un pibe común, le gustaba ver a los amigos, ir a bailar, las chicas, le gustaba todo tipo de música, soñaba con conocer a Los Redonditos, le gustaba folklore la música, la diversión, la birra como decía él.
Era mi hijo, a veces alguno dicen muy a la ligera “negrito de mierda”, yo estoy orgullosa de tener un hijo negrito, inmensa, enteramente orgullosa. Hoy no lo tengo, el dolor, la angustia estará siempre. Cuando a los hijos se los pierde, no los tenés nunca más. Pero yo si me consumo, eso no me lleva a nada, tenés que hacer algo y empezás a hacer algo. Del dolor sacás cosas buenas.
El se enojaba con las injusticias y no podés ser egoísta y encerrarte en tu dolor y mi hijo me enseñó con su desaparición a no ser egoísta, a mirar alrededor, al costado, a no encerrarme porque si mi familia estaba bien se podía venir el mundo abajo y no soy la única, a muchas madres les pasa eso y está mal, mi hijo me enseñó a mirar al prójimo, a hacer mío el dolor ajeno, el dolor de otros, darle un abrazo a Angélica y decirle vas a encontrar justicia.
Aprendí a compartir más y compartir el dolor de muchas madres, mi hijo me enseño a ser más gente, más solidaria.
Hoy es lindo cuando viene un nene a mi casa y le doy un juguete, un lápiz, pequeñas cosas y podérselas dar, que mi casa se llene de chicos, No lo tenés a tu hijo, pero sos mejor persona.
Sobre el asesinato de Luciano
Luciano Arruga, de 16 años, fue visto por última vez el 31 de Enero de 2009 en el destacamento policial de Lomas del Mirador. Distintas pruebas reunidas en la causa que la justicia caratuló como “averiguación de paradero”, indican que a Luciano se lo llevó la policía.
Tiempo antes de su desaparición, los efectivos policiales de dicho destacamento instaron a Luciano a robar para ellos en zonas liberadas; tras negarse, comenzó a ser detenido y golpeado constantemente.
La primera fiscal, Roxana Castelli, desoyó a la familia y los primeros 45 días desde la desaparición entregó la investigación a la misma policía sospechada, lo que determinó que hasta el día de hoy Luciano continúe desaparecido, y su historia, que es la historia de miles de pibes de los barrios más humildes, se sume a la larga lista de personas desaparecidas y asesinadas a manos de las instituciones que componen el aparato represivo del Estado. Por este motivo los familiares, el CELS y la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) – La Matanza,) solicitaron, en diciembre pasado, el enjuiciamiento de esta Fiscal ante la Secretaría de Enjuiciamiento de Magistrados.
Tras el apartamiento de Castelli, la investigación pasó a la fiscal Celia Cejas. Bajo su dirección se peritaron en 2009, el Destacamento de Lomas del Mirador, la comisaría 8va y un patrullero: los resultados determinaron que Luciano estuvo en todos esos lugares.
Con la lucha, y el apoyo de organizaciones políticas, sociales, y de derechos humanos, sus familiares y amigos consiguieron, en diciembre de 2011, el cierre del destacamento donde Luciano fue visto por última vez, con el fin de establecer allí un Espacio para la Memoria.
Al mes de cerrado el ex destacamento, la intendencia de La Matanza, no cumplió con los términos para ceder definitivamente ese espacio a la familia de Luciano, y muy por el contrario, quiso imponer allí, una oficina de la Municipalidad de La Matanza.
Mientras el gobernador Daniel Scioli y sus sucesivos ministros de Seguridad, en línea con su política represiva, mantienen en la fuerza a todos los policías involucrados en la causa.
Por otro lado también se consiguió, hace dos semanas, que el juez de Garantías Gustavo Banco declinara su competencia en la causa, cursada por “averiguación de paradero” para trasladarla a la Justicia Federal bajo la carátula de “desaparición forzada”. Horas antes el mismo juez había ordenado la detención del teniente de la Policía Bonaerense Julio Torales, por otro episodio ocurrido en septiembre de 2008 cuando Luciano fue brutalmente golpeado en el destacamento mientras lo mantenían demorado.