24 de marzo: las plazas nos invitan a recordar

Este año, la característica marcha del día de la memoria que conmemora a los  detenidos, desaparecidos, torturados y asesinados del último golpe militar, reflejó más que nunca la necesidad de los argentinos de recordar.  Partió desde Plaza Sáenz Peña con destino a Plaza Alvear; lugares donde es posible observar el reconocimiento a la lucha de estas madres y abuelas desesperadas. Sitios donde se han dejado, tallados en  mármol, los nombres de los caídos como un grito en el aire imposible de olvidar.

  Este jueves 24 hay que decirlo, no fue simplemente un jueves más. Seguramente quedara registrado en la memoria de cientos de personas de todas edades que se acercaron al lugar con el afán de revivir antiguas luchas y de apoyar nuevas causas. En el decaer de las horas , familias enteras, generaciones distintas gritaron y se emocionaron nostálgicos por un pasado que está lejos de quedar atrás. Por su parte, acompañadas por tambores, petardos y cantos las distintas organizaciones también se hicieron  escuchar. Activistas de HIJOS, miembros de INADI, estudiantes de los centros de Ciencias de la Educación y Trabajo Social, militantes del Partido Comunista, del Peronista, la CTA  reclamaron juntos "juicio y castigo" y "nunca más".

  Pero este 24 de marzo fue además, la culminación de una semana cargada de actividades. Días previos a la marcha se realizaron  distintos eventos no menos dignos de mencionar.  "Música por la Identidad", organizado por HIJOS, posibilitó a los  artistas locales como Argentino Bordolino y Cuarteto Furtivo, perpetrar su propio homenaje. La escuela Normal, por su parte, se sumó a la propuesta con una exposición de trabajos sobre "Periodismo y dictadura" que dio que hablar y en Oro Verde la jornada 30.000 Razones tampoco se quedó atrás.

 Las plazas entonces son lúdicas, son encuentro, pero también son memoria y verdad. Son refugio de los que luchan y amparo de los desesperados. Son un rinconcito invaluable de la ciudad.