“Las empresas y quienes viven de la especulación sienten que este es su tiempo”

En el Enredando las Mañanas de este jueves 6 de julio conversamos con Diego Montón, de la Unión de Trabajadores Rurales Sin Tierra (UST) de Mendoza, sobre las causas judiciales que están atravesando. El miércoles por la noche lograron que una casilla empresarial que se había instalado violentamente en una de las comunidades, se retirara.

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“El 29 de mayo en una comunidad campesina ingresó una banda de nueve personas, dos armadas, apuntaron y amenazaron a un par de miembros de la comunidad y produjeron una casilla dentro de un campo de uso comunitario de la comunidad”, contó Diego Montón. “A partir de ahí, la comunidad montó una carpa de resistencia frente a la casilla” y “todo este mes ha sido un mes donde la comunidad ha estado en permanente vigilancia para que esa gente no pueda moverse de la casilla”. Mientras tanto “la policía incautó dos armas que tenían y este lunes el fiscal de la unidad de Las Heras- Lavalle imputó a estas personas por usurpación y amenazas agravadas y coerción y los intimó a salir del campo y sacar la casilla”. El miércoles a la noche se retiraron de la comunidad “así que es un campo al que vuelve la paz y las familias vuelven a poder trabajar la tierra y pastorear los animales, que es de lo que viven”.

El referente de la UST remarcó que “hay una gran presión de las empresas y pícaros que viven de la especulación que sienten que este es su tiempo, no solo en la provincia sino en todo el país”. También aseguró que es “por muchos años de organización” que “hoy muchas de las comunidades están organizadas y eso permite obtener resultados favorables para las familias”.

Montón se refirió además a otra comunidad que desde el 2011 atraviesa una situación similar: “tiene un conflicto con una transnacional española, lamentablemente se hizo conocido el caso cuando la policía disparó balas de goma e hirió a un campesino que al día de hoy todavía tiene perdigones en su pierna” y por otra parte la empresa Texone, de Córdoba, “en el 2014 actuó introduciendo tres casillas de manera clandestina y violenta en un campo”. La comunidad ya venía denunciando a esa empresa por asesinato de animales, cortes de alambres y amenazas que “llevaba adelante un subcomisario a nombre de la empresa”.  Montón explicó que “pasaron tres meses y medio y la comunidad había hecho muchas denuncias para que saquen las casillas y el poder judicial nunca actuó”, entonces “la comunidad sacó las casillas por su cuenta, dando aviso a la policía, y las entregaron en la ruta”. Desde la comunidad se habían presentado más de 35 denuncias, pero “el fiscal le dio lugar a la única denuncia que hizo la empresa diciendo que habían recibido amenazas cuando sacaron las casillas y elevó la causa a juicio, lo apelamos y este viernes hay una audiencia donde el juez de garantías define si eleva o no a juicio a estos ocho campesinos y una campesina de la comunidad”. En la audiencia a la que hace referencia se anunció un cuarto intermedio y la resolución del tribunal sería el 4 de agosto.

Por último, Diego Montón contó que “la radio Tierra Campesina está funcionando con programación todo el día, con programas que son de los más escuchados por el departamento de Lavalle”. Esa emisora es una de las pocas que consiguieron acceder a una licencia. Aseguró que “se sostiene con militancia y la sostiene también el propio pueblo que ha visto en la radio una herramienta para expresar la voz”. Dijo también que “de varios de los proyectos FOMECA que estaban aprobados nunca llegó el recurso y sigue existiendo cierta interferencia que nos limita a Lavalle”, lo que deja en evidencia que los medios comunitarios, alternativos y populares, son vistos como medios pequeños, sin posibilidad de estar exentos de interferencias y con preocupantes límites de alcance, aun cuando se haya conseguido la legalidad, como en este caso, casi una excepción.