Carlos Zaidman: “los que siempre empujamos para derrotar la impunidad somos los sectores populares “
Escrito por Red Nacional De Medios Alternativos el 12/05/2017
A partir del fallo de la Corte Suprema de la Nación en relación a la aplicación del 2×1 a genocidas, desde el Enredando las Mañanas reflexionamos con Carlos Zaidman, de la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos y referente de Justicia Ya! de La Plata acerca del entramado represivo que se está visualizando en el escenario nacional.
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En primer lugar, Zaidman se refiere al papel esperable por parte del Estado que, entiende, “debe, debió y deberá hacerse responsable de lo producido durante el terrorismo de Estado, valga la redundancia. Este es el compromiso que debió asumir y que realmente no lo cumplió, llevamos 40 años y estamos en el punto que estamos”. Esta falta de compromiso y reconocimiento, implicó que “tuvimos muchísimos años para empezar los juicios, empezaron juicios fragmentados, los que logramos. A partir de la pelea de una gran parte del pueblo, se pudo derrotar la Ley de Obediencia Debida y Punto Final y avanzar con los juicios. Ahora bien, hoy los que detentan el poder político de este Estado continúan incumpliendo, pero además, por su propia línea política e ideológica, profundizan este incumplimiento tratando de hacer letra muerta de lo que este pueblo logró con su lucha (…) ya no a través de una ley, que le sería muy gravoso políticamente volver a hacer, sino a través de la justicia. (…) los juicios fueron una gran proclama nacional al respecto de lo que fue la dictadura pero que no tiene efecto jurídico alguno sobre los responsables de 30.000 desapariciones, de robos de bebés, violaciones, torturas, secuestros, asesinatos, etc”.
Esta medida de la Corte, entiende el integrante de Justicia Ya! se suma a una política que implicó la “profundización de los domiciliarios, es decir, sobre un universo de 1100 imputados por delitos de lesa humanidad, 800 están en sus casas. De esos 800, una gran parte venían de antes, pero es una profundización. Con el intento ahora de la domiciliaria de personajes muy emblemáticos como es Etchecolatz, que ahora se le suma esto del 2×1, realmente nos da un cuadro de un nuevo indulto, o mejor dicho un nuevo punto final a todas las condenas. Acá sí, pasó pero no hubo responsables, cuando todos sabemos que pasó, que hay y hubo responsables y que deben pagar”.
Entre las encuestas y la “reconcicliación” de la Iglesia
El provocativo fallo de la Corte se dio en la misma semana en que funcionarios del gobierno nacional se reunieron con el grupo de Cecilia Pando y en que la Conferencia Episcopal Argentina hiciera un llamado a la “reconciliación”. Al respecto, Zaidman afirma que “este gobierno construye mucho a partir del termómetro que les dan las encuestas. Evidentemente, y por suerte, nuestro pueblo reaccionó y le dijo no, entonces ahí, después de haber apoyado abiertamente, tuvieron que salir a dar marcha atrás desde el discurso, pero no hacen nada desde lo legal para que sea así”.
En relación al papel de la Iglesia, recuerda, “no es el primer avance de la Iglesia, y no es el primer avance del Estado en este sentido, pero sí hay en este momento, acompañando a esta política de Estado la iglesia con los sectores reaccionarios de siempre tratando de imponer esta reconciliación. Reconciliación obviamente imposible en cuanto no ha habido justicia, en tanto todavía son delitos que se siguen cometiendo, como que hay 30.000 compañerxs que no sabemos donde están, hay más de 300 bebes en su momento -hoy jóvenes, chicos y chicas- que no conocen su identidad y todavía estamos soportando los efectos económicos que produjo la dictadura. Hay personas que se beneficiaron con el golpe de Estado como los Blaquier, por ejemplo, como la Ford, otras tantas empresas que en su momentos prestaron sus instalaciones y sus vehículos para colaborar con el genocidio y hoy siguen siendo los amigos de los gobiernos”.
Paradojas y doble discurso
Días después de esta decisión de la Corte, y el día en que se convocó a una movilización que desbordó las calle de las principales ciudades del país y muchas otras, el Parlamento votó una ley que busca dejar sin efecto el controversial fallo. Zaidman resalta que “estos mismos legisladores que, alegremente y a mano alzada, votaron a los mismos jueces para que estuvieran en la corte y son los que impulsaron el 2×1, hoy ante el costo político que esto ha producido se lavan la cara y votan en contra. Ahora, el doble discurso no es nuevo, es evidente que hay, en todo esto, además, un trasfondo electoral, una utilización de este tema y otros fines electorales. Ahora me gustaría además, que atrás de esta ley que se propugna, venga otra que anule la ley anti piquete, la ley antiterrorista. Eso no lo van a hacer porque también es política de Estado y es la herramienta que ellos tienen para poder o tratar de disciplinar al conjunto de la sociedad”.
Para el expreso político, esto “cierra en la práctica que la anulación de las leyes y el avance fue gracias a la presión popular que además se encontró en un momento político propicio para poder derribarlas y avanzar con los juicios. Pero también tuvimos que luchar contra la fragmentaciones, contra los juicios a pocos genocidas y por pocos compañeros, que había que repetir una y otra vez porque iban cambiando los escenarios pero los genocidas seguían siendo los mismos. Recordemos que el primer juicio fue al genocida Etchecolatz, después se fue avanzando y luego se llega a un juicio interesante que es el de la ESMA que está todavía hoy, desde hace tres años, a 80 represores, pero igual ya hay un ‘ESMA tres’. Siempre se ha fragmentado, esto ha sido funcional a la impunidad y esto es lo que arrastramos (…) Además también conlleva una impunidad biológica, cientos de genocidas que se van muriendo sin haber pisado siquiera tribunales, siendo que a nosotros mismos, que somos los que fuimos secuestrados, también nos va llegando nuestra hora.
Zaidman no deja margen a otra interpretación que, “evidentemente, los que siempre empujamos para lograr derrotar la impunidad siguen siendo los sectores populares y el Estado adquiere distintas caras pero siempre de fondo ha defendido la impunidad. Impunidad que le es útil además para poder seguir reprimiendo”.
El fallo y el escenario latinoamericano
En estos días se conoció también a partir de declaraciones de Gracuiela Fernández Meijide, que ya en 2013 la Corte Suprema había fallado aplicando el 2×1 en un caso similar. Zaidman, al respecto, plantea que no pueden hacerse lecturas fuera de los momentos políticos y recuerda que “lo que fue simbólicamente el que un genocida haya sido jefe del ejército durante el otro gobierno”.
“Ahora bien -continúa-, hoy estamos en un escenario fundamentalmente latinoamericano y mundial realmente lamentable, donde hay un avance de los sectores de las economías concentradas y que van imponiendo sus políticas en los distintos países que componen sus feudos. Creo que hoy el momento es ese y obedece a eso y obedece también a nuestra debilidad de no poder derrotar eso (…) Si nos lograron dividir y lograron imponer en muchos aspectos la impunidad, también fue por roles propios de no entender y no comprender la responsabilidad del Estado en todo esto, como les paso a muchos organismos de DDHH durante el gobierno anterior que fueron cooptados”.