Agencia Periodística Timbó: «Escuchar es un acto revolucionario»

La Agencia Periodística Timbó comenzó a funcionar en la zona entre Chaco y Formosa en el año 2013, con la intención de desarrollar estrategias comunicacionales que visibilicen las luchas y reivindicaciones de las comunidades de pueblos originarios de la región. Su lema, «escuchar es un acto revolucionario«, da cuenta de un posicionamiento ético y político que desarrollan en la práctica comunicacional cotidiana. En el Enredando las Mañanas escuchamos la voz de Diana Della Bruna, una de sus integrantes.

Descargar audio.

Enredando las Mañanas: Comentanos la experiencia de la agencia periodística que llevan adelante allá en Formosa y cuáles son los casos que cubrieron hasta la fecha.

Diana Della Bruna: Nosotros vivimos hace seis años en la zona ubicada entre Chaco y Formosa, formada por Pampa del Indio y Las Lomitas, respectivamente. Allí trabajamos con comunidades y organizaciones indígenas Qom, Pilaga y también tenemos contacto con el pueblo Wichi, para ver el tema de tierra y territorio que es lo que los afecta. Es una de sus reivindicaciones más profundas. De ello se derivan otras cosas: los recursos naturales, el acceso al agua, el acceso a la justicia. Otro de los asuntos urgentes tiene que ver con la criminalización de la protesta, cuando las comunidades protestan.

Básicamente nos dedicamos a trabajar con estas organizaciones estrategias comunicacionales para llevar estos temas a los medios, que se divulgue y que eso genere acciones específicas en los territorios donde viven.

E.L.M: ¿Hace cuánto vienen con esta agencia periodística?

Diana Della Bruna: Desde el 2013. Nosotros antes trabajábamos en asesoramiento a las comunidades, y en este momento también, para que tengan sus propios medios de comunicación indígenas. Específicamente trabajamos en garantizar el funcionamiento de una radio, que es el medio más accesible. También trabamos en la formación de comunicadores y formación en gestión de radio para ellos.

Por otro lado, cuando capacitábamos nos surgió la necesidad de poder decir algo como sociedad occidental, respecto de cómo nos relacionamos con las comunidades indígenas y de esa manera poder construir una sociedad intercultural, una sociedad respetuosa de los idiomas, de las costumbres y de los derechos indígenas que están contemplados en nuestra constitución desde 1994, reconociendo la preexistencia étnica de los pueblos originarios.

Es muy importante generar ese diálogo intercultural, que nos apropiemos de ello y que podamos tomar conciencia que todos debemos defender los derechos de los pueblos originarios, ya que estamos habitando el mismo territorio y tenemos que generar un dialogo que deje de ser de carácter imperialista y de imponer determinada política a una comunidad que tiene otras costumbres.

E.L.M: Son conocidos los reiterados ataques represivos a las comunidades originarias. ¿Cuál es el rol que ocupa la agencia periodística teniendo en cuenta que intervienen en los asuntos de las comunidades?

Diana Della Bruna: Nosotros inscribimos nuestra práctica comunicacional en estrategias comunicacionales. Entonces cuando planteamos que un hecho debe darse a conocer, consultamos con las comunidades y ellos deciden que lo que quieren es decir su verdad. Plantean que siempre se los muestra como borrachos, como vagos, que quieren vivir subsidiados por el estado.

En los grandes medios, quizás salen los cortes de ruta que hacemos con las comunidades pero nunca dicen porqué se realiza el corte, cuál es el problema de fondo.

Un caso que deja en claro todo esto fue la masiva criminalización de la protesta en Pampa del Indio, una localidad de unos 15mil habitantes, donde imputaron a 70 dirigentes y miembros de comunidades. Se llevaron adelante procesos con carátulas como incitación a la violencia, cuestión agravada por el uso de armas, bloqueo de la circulación pública. Fíjate vos la magnitud de los hechos, 70 imputados en un pueblo pequeño.

Las imputaciones se realizaron en el marco de represiones que hubo en el año 2012, otra en el 2014 y anteriormente por un desalojo en el año 2010. En esas represiones, además del violento operativo, se secuestró  a más de 5 personas llevándoselas lejos de su comunidad. Se las mantuvo incomunicadas y solo con un habeas corpus pudimos saber dónde estaban.

Otro de los hechos que aqueja a las comunidades es la falta de agua, muchos de ellos juntan el agua de charcos contaminados con glifosato que arrojan a la vera de la ruta. En esa zona Ornequian tiene 40 mil hectáreas que le pertenecen al pueblo Qom, y arroja bidones de glifosato porque se la pasan fumigando. Ese agrotóxico contamina el ambiente y a las personas. Hubo el caso de un niño que murió al caerse de un carro cuando iba en busca de agua.

Entonces todavía no se solucionó el tema del agua pero las causas siguen en contra de los compañeros. Frente a esto, sin saber leer ni escribir, sin asesoramiento legal, los compañeros se contactaron con la comisión de derechos humanos de la legislatura de la provincia de Chaco, consiguieron un audiencia con el gobernador quien intercedió para que desestimen las causas que no corresponden ni deberían pesar sobre ningún compañero.

E.L.M: Frente a esta realidad y a la imposición de los grandes medios, ¿cómo hacen ustedes como agencia para traspasar esta barrera?

Diana Della Bruna: Creo que el diálogo y el acuerdo con las organizaciones es lo esencial. Son las comunidades organizadas quienes marcan el paso de lo que hay que hacer. No hacer nada sin consultarles.

Otro aspecto importante tiene que ver con proteger la información. Nos han robado información, han entrado a nuestras casas y nos han robado tarjetas de memoria, discos que contenían información. En este sentido creo que estamos en el aprendizaje de saber cuáles son las medidas de seguridad que uno debe tomar. Debido a esto también nos parece importante poder formar parte de la Red Nacional de Medios Alternativos, para protegernos y construir en conjunto.

Tenemos que ser conscientes que estamos siendo partícipes de procesos de liberación social. Para ello debemos tomar la experiencia de los medios comunitarios que en este encuentro nos han transmitido su experiencia para llevar a la práctica en nuestros lugares. Tenemos que saber que nosotros no estamos para sacar fotos a un niño desnutrido, no estamos para construir la imagen de pobreza que construyen los grandes medios. Nosotros estamos para intervenir en los problemas de las comunidades.