Queremos la expropiación. Vivienda Digna para todos
Escrito por Red Nacional De Medios Alternativos el 13/10/2009
No queremos que nos regalen nada, por eso seguimos luchando por nuestras viviendas. Queremos quedarnos en el barrio donde nos criamos, donde tenemos nuestras familias y nacieron nuestros hijos. Exigimos la expropiación del terreno que habitamos, y queremos pagarlo con esfuerzo y sacrificio. Binner, no nos discrimines por ser humildes, somos personas trabajadoras y también tenemos derechos.
Rosario – Provincia de Santa Fé
Cada vez que se produce un desalojo en la ciudad se lleva a la gente a las afueras, donde no hay nada. A los pobres se nos excluye como si no fuésemos ciudadanos, como algo que hay que ocultar o suprimir. Sabemos que para nosotros (si es que los gobernantes nos tienen en cuenta para algo) sólo hay migajas de lo que ellos dejan sin usar.
En este barrio, “la sexta”, hay mucha gente que fue desalojada, trasladada hacia la periferia y volvió porque no pudo soportar las condiciones de vivienda que ellos mismos habían aceptado.
Nuestros hogares están hechos en Ituzaingo 60 bis porque hace casi 3 años este mismo gobierno que hoy nos quiere echar, nos permitió vivir ahí con la condición de que construyamos casas de material, viviendas dignas; y así lo hicimos. Habitamos un terreno abandonado por más de 30 años, un basural que limpiamos con el sueño de poder tener nuestras casas. De la noche a la mañana apareció “un dueño” y la municipalidad, la provincia y las empresas que proyectan en la sexta un lugar para los ricos, vieron el negocio y se pusieron de su lado.
Sólo con la lucha y la unidad logramos frenar el primer desalojo, ordenado para el mes de abril pasado, y conseguimos que la municipalidad se comprometa a dar una solución a nuestro problema. El Intendente Miguel Lifschitz firmó en agosto la propuesta de expropiación para presentarla ante la provincia.
Ahora, después de las mentiras, promesas y faltas contra nosotros, después de la detestable y repudiable actitud del Gobernador Binner, que no asistió a la reunión cuando se había comprometido a estar presente, se nos ofreció un plan de viviendas en el barrio 7 de Septiembre, en las afueras de Rosario, en un terreno que ya está habitado por familias que también necesitan viviendas.
POR QUÉ QUEREMOS LA EXPROPIACION
Porque en Ituzaingo 60 bis construimos, además de casas, la identidad con nuestro entorno, el barrio “República de la Sexta”. En este barrio tenemos beneficios como el acceso al servicio de transporte público, la cercanía a los hospitales, al trabajo y al colegio de nuestros hijos. Es nuestro lugar, donde también construimos la solidaridad entre vecinos, que son los que siempre están para darnos una mano.
La mayoría de nosotros se crió en la sexta, acá están nuestras familias y nacieron nuestros hijos. Luchamos por la expropiación del terreno porque no queremos que nos regalen nada, ya construimos nuestras casas, trabajamos para tener nuestro techo y poder vivir tranquilos.
POR QUÉ NO QUEREMOS LA REUBICACION
Ya tenemos nuestras viviendas, construidas con nuestras propias manos. Lo que el gobierno provincial nos ofrece es sólo un proyecto, muy poco serio, un plan de viviendas en el barrio 7 de septiembre, en un terreno en el cual viven actualmente más de 80 familias. Lo paradójico de este proyecto, ante la necesidad de políticas que apunten a solucionar el problema habitacional que sufren los sectores más humildes de la ciudad, es que para reubicarnos a nosotros desalojarán a otros.
Además este gobierno que ahora nos promete “casas” es el mismo que antes de las elecciones se comprometió por escrito a expropiar el terreno que habitamos y que hoy nos amenaza con que “si no acordamos la reubicación va a haber muerte y desalojo”.
No queremos que nos regalen nada, por eso seguimos luchando por nuestras viviendas. Queremos quedarnos en el barrio donde nos criamos, donde tenemos nuestras familias y nacieron nuestros hijos.
BINNER, no nos discrimines por ser humildes, somos personas trabajadoras y también tenemos derechos.
Exigimos la expropiación del terreno que habitamos, y queremos pagarlo con esfuerzo y sacrificio.