Entre Ríos: centenares de vecinos sin luz hace semanas
Escrito por Red Nacional De Medios Alternativos el 02/12/2008
En la ciudad de Paraná, en el barrio San Martin, más de quince familias hace más de dos semanas que no tiene electricidad. Luego de una visita del personal de ENERSA, las soluciones llegarían a fines de diciembre. Según se informó desde las oficinas comerciales de la empresa, los vecinos del volcadero no son clientes, es por eso que no pueden reactivar el servicio.
Desde hace 80 años, más de tres generaciones de personas, viven en un basural a cielo abierto. Allí, actualmente, más de 150 personas de entre 18 días y 81 años, soportan los intensos calores sin electricidad. Los vecinos aseguran que el personal de la empresa se acercó y prometió regresar pero nunca cumplieron. A su vez, desde la empresa se argumenta que dichos vecinos no tienen derecho a reclamar dado que no son clientes de la empresa.
Una vez recibidos por Vicente Barrios, de 61 años, recorrimos el barrio. Pudimos ver que, efectivamente, existe un cable cortado en el transformador. Aparentemente sería solo éste el desperfecto técnico.
Otros de los argumentos que maneja la empresa es que dicho transformador es muy peligroso para la salud de las personas del lugar. En relación a esto, Don Vicente nos decía “tenemos un promedio de 5 enfermedades por personas y nos vienen a cuidar justo ahora”.
Según la familia Barrios, “desde hace cinco años que nadie paga la luz pero, nos van a decir que es sólo acá, acá hay otra cosa oculta”. Los medidores que controlaban el consumo de los vecinos fueron retirados por la empresa hace más de cinco años, desde entonces todos estaban enganchados.
Una de las soluciones que les sugirió ENERSA era colocar un pilar comunitario entre los vecinos. Dicha propuesta fue comunicada por la vecinal quien se encargó de juntar las fotocopias de los documentos, requerida para iniciar el trámite del pilar. Estos requisitos aún se encuentran en los cajones de la vecinal.
Viendo la complicidad de los directivos de la vecinal, los propios vecinos decidieron formalmente pedir la recomposición del servicio y cuando realizaron la compra del medidor inmediatamente fueron comunicados que se les devolvería la plata argumentando que, según Ramona Caimer, vecina del lugar, “pronto van a volar a la mierda de ahí”.
Seguiremos de cerca que sucederá con los vecinos del volcadero.